Abelardo y Alicia nos llamaron después de Navidad para que le organizáramos una boda pequeña, para familiares y amigos: algo íntimo y sencillo en la que la prioridad era celebrar y disfrutar.

 Días antes de la celebración, acompañamos a Alicia y a Abelardo al Registro para que formalizaran el matrimonio. Como suele suceder cuando nos reunimos con esta pareja, nos reímos mucho y nos encantó poder estar con ellos en ese momento.

El 22 de Julio fue el día elegido y La Hacienda La Celada el lugar escogido para realizar la ceremonia y la posterior celebración. Un amigo de los contrayentes, Lolo Contreras, fue el encargado de actuar como Maestro de Ceremonias llevando la emoción y la risa a los invitados.

Los novios cuidaron especialmente las músicas que debían sonar en cada momento y durante la fiesta posterior y tanto Lolo como su equipo supieron entender el concepto de celebración que tenían preparado para los suyos. Hay que resaltar el vídeo que le regalaron unos amigos, Juanjo y Vanessa, que fue proyectado durante la barra libre y que destacó por su emotividad y su simpatía.

La novia fue peinada y maquillada por Elena Toro, llevaba un recogido con bucles que se adornaba con un tocado de Secretos de Novias del que Alicia se enamoró desde el primer momento.

El vestido de Vértize Modas era justo el que cuadraba en su estilo haciéndola ser una novia natural, realzándola y, sobre todo,  siendo «muy ella». El ramo fue un espectacular bouquet en el que destacaban las rosas blancas y malvas empolvado que lo realizó La Rosa de Oro.

Abelardo tuvo claro desde el primer momento que llevaría un traje de tres piezas, fue hecho a medida en Tom Black y personalizado tanto en la chaqueta como en la camisa.

La parte dulce la pusimos nosotros, diseñado entre Alicia y Abelardo, pusimos una mesa dulce que hizo las delicias de los más pequeños y de todos los mayores.

Sólo nos queda desearles, con todo el cariño del mundo, que sean muy felices y que no pierdan la sonrisa, y la risa contagiosa que tienen, nunca.