En cualquier lugar surge una idea, una foto, una oportunidad.
Ayer atardecía en Sevilla mientras buscábamos unas maderas para trabajar en un sitting muy especial para una pareja de novios que cuenta los días que quedan hasta abril. Hacía un frío intenso y repentino que casi no nos ha dejado tiempo para sacar los abrigos del armario, pero nada nos frena.
Al mirar por la ventana nos maravillamos, de repente había que parar, teníamos que compartir este momento con vosotros. Echamos el coche a un lado y aquí lo tenéis, y es que nosotros somos muy de disfrutar las pequeñas cosas aunque éstas ocupen todo el horizonte. ¡Buenos días!
…Sureñamente
